Por Nicolás Palos
Tolkien y el derecho a la Fantasía: Apostillas al poema «Mitopoeia» y otros ensayos sobre la obra de J. R. R. Tolkien, autor: Alexis Louvet, editorial Legendaria, 135 páginas, ISBN: 978-8419343178.
En Argentina el libro fue publicado por la editorial Cien Pájaros, con el título Apostillas al poema “Mitopoeia” y otros ensayos sobre la obra de J. R. R. Tolkien.
Para la gran mayoría de mortales J.R.R. Tolkien es sencillamente el escritor de El Señor de los Anillos e inventor de un mundo donde hay elfos, orcos, dragones, y otras criaturas fantásticas. Quizás hay quienes reconozcan el impacto que tuvieron sus novelas en la fantasía posterior. Y entre todos ellos, unos pocos son los atrevidos que se adentran con mayor profundidad en su legendarium con obras como El Silmarillion o El Libro de los Cuentos Perdidos.
De vez en cuando, cada muchos años, en algún rincón remoto del mundo, aparecen algunos que se atreven a ir más al fondo. Son muy pocos los que cruzan el umbral y se adentran en el pensamiento del Profesor, en cómo miraba el mundo y en las razones esenciales del atractivo de su obra. Si eres uno de esos pocos elegidos, puede que este libro sea para ti.
Mitopoeia es un poema de Tolkien que, se podría decir, comprende en sí gran parte de su pensamiento en relación con la Fantasía y la mitopoiesis (el arte de escribir mitos). El libro Tolkien y el derecho a la Fantasía, del sacerdote argentino Alexis Louvet, nos ayuda a introducirnos en el poema y nos muestra su gran profundidad. El subtítulo del libro es esclarecedor: “Apostillas al poema «Mitopoeia» y otros ensayos sobre la obra de J.R.R. Tolkien”.
Quien haya leído el poema sabrá que no es un poema sencillo. Mitopoeia es la síntesis de su pensamiento estético, creativo y literario, además de expresión de cómo comprende Tolkien el mundo. El padre Louvet nos presenta el poema, lo introduce y lo divide en partes. Los distintos capítulos, que resultan de la división de estas partes, comentan el poema estrofa por estrofa, resultando una espléndida herramienta para la comprensión de este.
A lo largo del libro, el poema se nos revela como poliédrico, multifacético, con múltiples dimensiones y lecturas posibles. El autor nos muestra sus relaciones con la antropología, la literatura, la estética, la lingüística, y hasta la metafísica (o especialmente la metafísica), y hace referencias a multitud de autores como Santo Tomás y San Agustín, Aristóteles, Platón, Sartre, Pascal, y muchos más. La obra, de una extensión más bien breve, no llega más que a introducir algunos aspectos del poema, en muchas ocasiones dejando al lector con el deseo de profundizar mucho más. En mi opinión, el mayor ejemplo de esto es la mención, en tres rápidas líneas, de la relación entre el poema y la teoría del conocimiento aristotélica (p.43).
Finalmente, nos ofrece algunos ensayos que nos aproximan a aspectos de otras obras de Tolkien. En mi opinión, el más relevante de estos es el último, “Sobre la nostalgia”, por ser el más novedoso y sorprendente. En este se nos plantea la posibilidad de que Tolkien empleara “todo su arte para conseguir que ese toque de profunda tristeza, que embarga el corazón, punzante y lejana, se hiciera más intenso” (p.135).
Si tuviera que dar una opinión sincera respecto al libro, es que se queda corto. El autor nos muestra una amplia variedad de referencias y comentarios que, a menudo, resultan sorprendentes. Pero en muchas ocasiones se queda allí, sin llegar a profundizar en la mayoría de temas mencionados. Desde luego, esto no parece ser por carencia del autor, sino por la intención de la obra.
En definitiva, para los más avezados en el pensamiento del Profesor, puede que Tolkien y el derecho a la Fantasía sirva a modo de descubrimiento de nuevas vetas, nuevos aspectos en los que profundizar, siendo esta obra una introducción que muestra esas nuevas líneas de investigación. Por otro lado, para aquel que conoce poco de Tolkien más allá de sus novelas, la lectura de este libro podría resultar en el descubrimiento de un mundo que ni siquiera imaginaban.